“Albahía”, restaurante marroquí de la calle Lavapiés 2. Me gusta porque nunca está abarrotado ni es un restaurante de moda, a pesar de que su ubicación, la cocina y los precios son fabulosos. Quisiera hacer hincapié en lo bien hechos que están algunos de sus platos, que parecen traídos directamente de Marruecos. Amables y serviciales, es un restaurante cómodo para comer o cenar bien. (Metro: Tirso de Molina).
“El Jardín”, restaurante tradicional en la calle Calderón de la Barca 8, junto a la Plaza de la Villa. Es un restaurante de comida casera, abierto en los sesenta, con muy buena relación calidad – precio, sobre todo el menú. (Metro: Ópera).
“Casa Marta”, restaurante sencillo, acogedor y tranquilo en la calle de Santa Clara 10. Ricas tapas y deliciosos guisos caseros. (Metro: Ópera).
“Magíster”, restaurante en la calle Príncipe 18. Por cada cerveza o bebida, se puede elegir entre varios tipos de tapas. El servicio es bueno, sin muchas esperas, el precio muy razonable para las bebidas y la comida siempre está rica. (Metro: Sol o Antón Martín).
“Mashita”, restaurante coreano en la calle de la Bola 12. Muy pequeño, con sólo cinco o seis mesas, ambiente familiar y una comida excepcional y muy ligera, además de muy barato. (Metro: Santo Domingo).
“La Rotonda de Pacífico”, restaurante en la avenida Ciudad de Barcelona 81. Ideal para comer arroz, que es la especialidad de la casa, en cualquiera de sus variedades, aunque el arroz con bogavante es uno de mis preferidos. El servicio es bueno y el precio razonable. (Metro: Pacífico).
“London”, restaurante en la calle Rodríguez San Pedro 44. Comida casera riquísima, sobre todo a la plancha. (Metro: Argüelles).
“Quinto Vino”, restaurante en la calle Hernani 48. Desde fuera parece una típica taberna andaluza, pero una vez dentro, l local cobra personalidad con las paredes cubiertas de fotos, anuncios de bodegas y recuerdos varios. Los camareros son amables y eficientes, hay una excelente e interesante selección de vinos por copas y siempre ponen una buena tapa con cada vinito. (Metro: Cuatro Caminos).
“Bazaar”, restaurante en la calle San Marcos 35. Uno de mis restaurantes favoritos ya que su carta cuenta con una amplia variedad de recetas de cocina mediterránea y algunos toques de inspiración internacional, sin olvidar sus recomendables postres. Su cuidada puesta en escena, con alacenas llenas de artículos alimenticios y sus enormes ventanales. Precios asequibles. (Metro: Chueca).
“Cervecería Michel”, en la calle Hileras 6. Un lugar donde podrás sentirte como en casa gracias al trato acogedor de su dueño. Situado a dos pasos de la Plaza Mayor es el sitio ideal para reponer energías tanto con sus variados menús como con sus platos estrella. (Metro: Ópera).
“Baco y Beto”, en la calle Pelayo 24. Destaca su comida, que consiste en tapas modernas con ingredientes tradicionles. (Metro: Chueca).
“Tabernas Acuerdo II”, en la calle San Bernardo 98. Tasca de las de toda la vida, en la que tiran bien las cañas y hay las mejores tapas. (Metro: San Bernardo).
“Estocolmo”, en la calle de la Palma 72. El DJ, la decoración, el precio, la calidad y el ambiente que le rodea, hacen la mezcla perfecta para tomarse uno de sus maravillosos Cocktails y comerse uno de sus conocidísimos perritos calientes. (Metro: Noviciado).
“El deseo de María”, en la calle Barbieri 15. Una de las mejores cosas del restaurante es el poder degustar su gastronomía rodeada de obras de arte, ya que se exponen cuadros de artistas emergentes con un talento extraordinario. (Metro: Chueca).
“Sudestada”, en la calle Ponzano 85. Un local donde se sirve “asian fine food” que permite viajar por el sur de Asia a través de cada uno de sus platos. Trato estupendo sin ser cargante. (Metro: Cuatro Caminos).
“Moharaj”, en la calle Buenavista 42. Uno de los mejores restaurantes hindú de Madrid. Es un restaurante pequeño, casi familiar, por lo que el trato es muy cercano. (Metro: Lavapies).
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